Natural Fuse aprovecha la capacidad de las plantas para absorber dióxido de carbono con el fin de crear una red, que se podría extender por toda una ciudad, formada por plantas asistidas electrónicamente que actúan como productores de electricidad que, además, absorben el CO2 generado.

La finalidad es crear un sistema colectivo de absorción de carbono, que compense la cantidad de energía consumida por los propietarios de las plantas, formando un interruptor diferencial natural.